sábado, 10 de noviembre de 2007

Lección #15: Romanticismo en público



Tipo: Actitud
Nombre científico: Pegajosus publicus
Nombre vulgar: Meloso

Aunque por norma general las actitudes de un insoportable son personales, hay excepciones en las que la concurrencia de otra persona –llámese cómplice, coautor, colaborador o partícipe –es ineludible. Actitudes que sin la participación de otro carecen de sentido.

Es el caso de esta efectiva actitud, que logra generalmente espantar a cualquiera en las cercanías. Es, de hecho, una de las más eficientes en la tarea de convertirse en un insoportable, y consiste básicamente en prodigarse en público arrumacos, zalamerías, añuñucos y mimos. En resumen, palabras y gestos melosos por doquier.

Para ser efectiva, esta profusión de melosidades debe ser percibida por todos quienes se encuentran en los alrededores, de manera que puede ir olvidándose de secretillos al oído, salvo que los mismos generen sonoras y pícaras risas, que sí están dentro de los medios a utilizar.

El arsenal de recursos debe incluir, además de las ya mencionadas risas, palabras melosas y ridículas para referirse al otro, del tipo cuchicuchi, guagüita o gordito/a, además de los siempre detestables términos animales, del tipo gatito, perrito, monito y similares, siempre en diminutivo. No hay que olvidar, por cierto, los gestos y actitudes corporales: besos –mientras más sonoros, mejor –, abrazos y algo más, a vista y paciencia de quienes lo rodean, le asegurarán bastante más que un metro cuadrado.

Si domina todo lo anterior y quiere llegar al extremo en la práctica de esta actitud, siga este consejo: hágale a su cómplice proposiciones de carácter sexual, recuerde en voz alta sesiones amatorias de alto calibre y, por último, apriete o toque alguna zona de aquellas llamadas pudendas. Efectividad 100% garantizada.